domingo, julio 29, 2007

Deseos de cosas imposibles

Río, porque llorar mientras se ríe parece que tiene algo de bueno, que las lágrimas no pesan tanto.
Pasaba por mi mente una y otra vez cada una de esas escenas que sin querer protagonicé, sin querer y sin darme cuenta hasta que las letras The end surcaron la pantalla, atravesaron las pupilas.
El momento de la primera mirada que me intimidó, las manos unidas en una caricia que quizás ya se te olvidó, aquel beso que nunca nos dimos, un abrazo que duró años, que durará más que eso, tus caricias en mi brazo, miradas que se esquivan acobardadas de los actos, vueltas y vueltas de un anillo que no tiene final, miedo.
Podría contar la historia, decir que empezó, como todas las historias, en una mirada más larga de lo normal, que se frustró en un abrazó en el que el tiempo se invirtió y que terminó con tu mano aferrando la camisa que llevaba mientras decías que me marchara ya.
Podría omitir que me paralizaba cada vez que oía la puerta y te sentía detrás, que me ponía nerviosa cuando te acercabas, que me daba miedo dejarme llevar, que me rompí cuando esa noche te vi llorar.
Supongo que podría, pero no lo haré.
Pocas veces pongo los pies en el suelo y, supongo que no tiene que ver con que sea final de julio, pero me queman más que nunca ponerlos ahí, quizás porque no lo entiendo, porque estoy asustada, porque nunca me había sentido tan pequeña...tan así....
No sé cuando perdí la noción, el camino, el sentido de mis pasos, me perdí y lo que más miedo me da es perderte, tenerte que olvidar.

Solas, hombro con hombro, cabeza con cabeza, las manos aferradas, las besábamos como si en vez de manos fuera labios, nos mirábamos, nos echábamos de menos ya, nos despedíamos sin separarnos, quizás no fuera adiós, quizás algún día nos volvamos a cruzar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No creas que esta es la contestación a esta carta sólo quizás quiero escribir un trozo de eso que lo mismo no escribiré.
Yo podría omitir que desde que te miré aquella primera vez siento que tu mirada no sale de lo mas profundo de mi, que el día que por fín dijistes que existía alguien en tu vida fue como si me echeras un jarro de agua fria sobre mi cabeza, que miro tu foto aqui una y otra vez, que pienso en ti, que creo que pasar un día sin tí esta siendo una tortura, no puedo sacar tus ojos, tu sonrisa, tus abrazos ni tus caricias de todo mi ser y mucho menos esos besos que llegaron tan dentro de mi que hoy después de dos dias sin ti no me dejan respirar.
Yo también podría omitir cosas y lo tendré que hacer.
Cuando soy conciente del todo el daño que hago se me cae el mundo encima, no quiero hacer daño, pero no sabes lo dificil que es olvidarte.
Una cosa es lo correcto y otra lo que sienta supongo pero todo este tiempo no me ha dado lugar a saber verdaderamente lo que siento así que quizás lo mejor sea hacer lo que sería correcto porque si de algo estoy segura es de que lo que siento acabará saliendo, quizás es tarde, pero espero que no.
Podría estar echa polvo, podría estar fatal, pero lo cierto es que no, esta vez estoy tranquila, puede que porque se que te tengo, puede que porque te pueda aunque sólo sea verte, puede que porque confío en al tiempo, puede que sea amor. No olvido nada, sólo intento dejar de sentir para no hacer mas daño

Anónimo dijo...

Una palabra no es nunca una palabra es algo más, quizas una palabra sea sentimiento, pues mira todo los sentimientos que habia dentro de mi