lunes, julio 23, 2007

Bibliothek

Estaba negra, vacía, oscura, abandonada, sudorosa…sola.

Sentada en la silla oía el suave murmullo del ventilador en funcionamiento, único aliento vivo en la habitación. Sentada en la silla observaba sus piernas cruzadas bajo la falda, guardianas de algo tal vez ya inexistente. Sentada en la silla, sola, oscura, sudorosa, abandonada, alegre, desesperada, observaba en silencio la puerta abierta, vacía aún mientras maldecía en silencio el momento en el que las horas habían comenzado a pasar espantosamente rápido.

Aliviada ahora porque nunca apareció.

3 comentarios:

AsDePiqas dijo...

¿nunca?
jo

Anónimo dijo...

quizás apareció y no se dio cuenta... esas cosas pasan-.....
yo creo que de este post hace falta segunda parte....*_*

Libelle dijo...

AsDePiqas: Nunca, jamas, never, ni aunque Dios hubiese bajado a obligarlo a ponerse en el umbral de la puerta =P


Safo:mmmh...quizás le hubiese dado tiempo a llegar, colocarse ahí, justo en ese sitio durante una milesima fraccion de segundo, y al verla concentrada como estaba decidió qe ya no lo necesitaba... Como los ángeles, solo que este no tenía alas =P