sábado, octubre 21, 2006

La llave en el bolsillo y el armario cerrado

Corro las cortinas....

Cierro las ventanas...

Apago las luces....

Salgo, y cierro la puerta con llave, pero antes compruebo que todo está como antes de que se terminase todo...

Todo está bien.


Una última lágrima se derrama furtiva por mi rostro, haciendo un pequeño camino entre el maquillaje. Dejo que llegue a la barbilla, y ahi la recojo.


Me doy la vuelta, aspiro profundamente, y sonrío: el Sol seguirá brillando, a pesar de todo.


Sólo queda esperar.

2 comentarios:

***SaRa*** dijo...

son tantas las historias que puedo imaginarme tras la puerta
al fin y al cabo esperar es lo que siempre vale

Libelle dijo...

Yo vivo demasiado tras esa puerta cerrada...A veces entro...uno, dos, tres minutos...pero eso es suficiente para que empiece otra vez...


Puede que nunca me haya atrevido a salir del umbral, al fin y al cabo...